Raiola O Hórreo celebra abril con tradición, deporte y convivencia intercentros

Durante el mes de abril, la residencia Raiola O Hórreo, en Santiago de Compostela, se convirtió en un animado escenario de actividades que combinaron tradición, deporte, creatividad y convivencia entre centros.

El mes arrancó con una experiencia gastronómica en honor a la Festa da Uña de San Lázaro, una de las celebraciones más singulares del calendario compostelano. Los residentes revivieron esta tradición y generaron un animado intercambio de historias alrededor de la mesa. Otro de los momentos más destacados del mes fue la celebración del Día Mundial del Circo, donde la alegría tomó el protagonismo. Con actividades inspiradas en el mundo circense, los residentes disfrutaron de una jornada lúdica repleta de risas, disfraces y actuaciones improvisadas. Esta iniciativa, además de fomentar la expresión creativa, ayudó a reforzar la autoestima y la complicidad entre los participantes.

Abril fue también el mes en el que Raiola O Hórreo organizó su primer partido de rugby, una actividad innovadora dentro de los programas de ejercicio físico para mayores. Bajo supervisión del personal, los equipos tuvieron un encuentro donde se priorizó el compañerismo, el movimiento y la diversión.

La colaboración entre centros fue otro pilar especial. Se realizó una comida intercentros con residentes de Raiola San Marcos que permitió estrechar lazos, compartir experiencias y disfrutar de una jornada diferente. El ambiente festivo y el intercambio entre generaciones dentro del propio colectivo sénior confirmaron la importancia de generar espacios de encuentro que trasciendan los muros de cada residencia.

El broche final llegó con la Festa dos Maios, una de las celebraciones más antiguas de Galicia que conmemora la llegada de la primavera. En Raiola O Hórreo, la festividad se tradujo en un taller de creación de centros de mesa con flores naturales, donde los residentes trabajaron en equipo y dieron forma a composiciones coloridas que decoraron los espacios comunes. La actividad culminó con una merienda saludable a base de brochetas de fruta, una propuesta que combinó creatividad y hábitos alimentarios positivos.

La suma de todas estas acciones no solo llenó de emociones el mes de abril, sino que confirmó una vez más el compromiso de Raiola O Hórreo con un modelo de atención centrado en la persona, en el que la cultura, el deporte y la comunidad son herramientas clave para vivir una vejez activa, digna y feliz.